Todos los años, el papa Francisco invita a un sacerdote a dirigir los Ejercicios Espirituales con los que toda la Curia del Vaticano se prepara para comenzar el tiempo de Cuaresma. Y este año, el ofrecimiento ha sido para el sacerdote y conocido escritor portugués, José Tolentino Mendoça, del que tuvimos la suerte de publicar su último libro: La construcción de Jesús.
Su libro nos transporta a una historia sencilla y al mismo tiempo polémica que recoge el evangelio de Lucas. Abrimos las páginas y casi sin darnos cuenta nos diluimos entre los comensales de una cena en casa de Simón el fariseo, que hoy recibe la visita inesperada de Jesús junto con sus discípulos. ¡Un invitado muy especial al que hay que conceder toda clase de atenciones!
En un momento, se sucede una escena llena de tensión cuando una mujer de nombre desconocido pero a la que se le conocía por su vida pecaminosa, logra ‘colarse’ en la casa de Simón y arrastrándose por el suelo, intenta llegar a tocar y besar los pies de Jesús. Y aquí, en apenas unos versículos, se suceden tres cuadros escénicos de una intensidad y sensibilidad inigualables. José Tolentino Mendonça consigue ir dibujando en cada uno de ellos, una imagen diferente de Jesús, analizando sus palabras, sus respuestas, sus preguntas e incluso sus gestos.
¿El resultado? Un precioso y emotivo relato sobre la personalidad de Jesús que revela el evangelio de Lucas. Pero una personalidad descubierta a través de lo que supone para los actores de la escena, tomar contacto con Jesús.
José Tolentino nos muestra en este libro que la confrontación con la persona de Jesús conduce necesariamente a una opción en favor de lo que Él significa. Lucas no nos pone ante una serie de doctrinas o virtudes morales, sino que nos presenta a una persona como único referente.
De lo que se trata es de reconocer o no a una persona, de decidir o no seguirla.