Lenguajes del siglo XXI para acercar la vida de un santo del siglo XVI. La vida eterna de san Ignacio de Loyola narrada desde su interior encuentra en el cómic un género excelente para inspirar a lectores de todas las edades, especialmente a los más jóvenes. La editorial Mensajero publica este mes de septiembre la adaptación en cómic del libro de José María Rodríguez Olaizola Ignacio de Loyola, nunca solo para llegar a los lectores de 14 años de edad, aproximadamente. Un nuevo género que se suma a la dramatización publicada en junio, Íñigo, una obra de teatro, escrita por el actor y director Jonathan Moore y destinada a escolares de secundaria.
Las ilustraciones de este libro Ignacio de Loyola son creatividad de Ignasi Flores quien ya ha participado en otros proyectos de la Compañía de Jesús: el cómic He tenido un sueño con textos de Mar Villarassau, SJ o la serie de dibujos de santos jesuitas para la web serjesuita.es, entre otras colaboraciones. El texto ha sido adaptado al lenguaje juvenil por el jesuita Pedro Rodríguez Ponga con el fin de acercar su figura a través de los momentos de su vida. Aunque el relato va más allá. Invita a la reflexión desde aquello que se aprende de Ignacio de Loyola: su inagotable búsqueda de la voluntad de Dios. En el texto siempre se encuentra un último párrafo que ayuda a reflexionar sobre la vida de cada persona.
En el prólogo, se extrae su legado, tres grandes obras que hoy siguen plenamente vigentes como regalo de Dios a través de Ignacio, a la iglesia y al mundo y enumera los Ejercicios Espirituales, la Compañía de Jesús y las Constituciones. El libro se puede trabajar de muy diversos modos: en grupos, individualmente, en oraciones, talleres. No requiere ningún conocimiento de la vida de san Ignacio y, aunque los cristianos puedan sacar más provecho espiritual, cualquier persona puede aprender lecciones útiles para su vida.