Las buenas preguntas siempre atraen. Y más aún, cuando lo que esperas es una buena respuesta. Y Jesús sabía hacer las mejores preguntas. Es curioso, sí. Dios también responde preguntando a través de los siglos y milenios.
Ludwig Monti, miembro de la comunidad de Bose y uno de los grandes especialistas italianos actuales en temas bíblicos, se interesó por las preguntas de Jesús a principios de 2013 y el proyecto tomó cuerpo con la edición en italiano del libro que fue todo un éxito de ventas en 2019. Monti tenía la plena convicción de que «las preguntas planteadas por Jesús son de gran interés para los hombres y mujeres de hoy». En este sentido, su libro Las Preguntas de Jesús es como una guía para que que las preguntas de Jesús resuenen en tu interior, «dejando que las preguntas den sal, sabor, sentido y luz a la vida».
Jesús hizo muchas más preguntas de las que recibió. Si nos ponemos a contar en los evangelios salen unas 217 preguntas (incluidas 111 a los discípulos y una directa al propio Dios) frente a las 141 preguntas que le hacen los distintos personajes que intervienen en la narración evangélica a lo largo de 118 pasajes. Con el cuidado tan exquisito al abordar todas las preguntas, Monti muestra la gran relevancia y atracción que generaba el estilo de predicación de Jesús y su familiaridad con la palabra de Dios.
Un aspecto muy relevante es el que aborda con preguntas recurrentes como: «¿No habéis leído la Escritura?» (Mc 2,23-26 o 10,2-3). El autor considera que Jesús demuestra una clara «pasión de leer y releer las Sagradas Escrituras, de buscar en ellos la palabra de Dios para nutrir la vida y la enseñanza”. En este libro, Monti presenta las preguntas de Jesús en «grupos» según cada Evangelio. Además, se presentan según temas. Por ejemplo, el Reino en Mc 4, 30-31; la recompensa (o la gracia) en Mt 5 : 46-47; el siguiente en Lc 10,36; la búsqueda (de Jesús) que enmarca el cuarto Evangelio (Jn 1 : 35-39; 18 : 4-8).
Monti ofrece una lectura interesante y muy agradable y fácil de seguir. Contextualiza las preguntas de Jesús, presentando muy bien su dinámica y pedagogía (para fortalecer el deseo de vida, amor y libertad) e ilustra el proceso que desencadenan. De esta forma, el autor demuestra cómo las preguntas son esenciales en la predicación de Jesús y caracteriza su ministerio público. ¿Su objetivo? Cuestionar y provocar conversión.
El contenido del libro -tan tratado de forma sencilla, vivencial y espiritual-, ayuda mucho a involucrarse en la historia de Jesús. Invita a responder a su llamada, a acoger su Palabra y a responder a esa gran pregunta que sigue planteando dos milenios después: «¿Qué buscas?» ¿A quién estás buscando? «.
Un buscar a Jesús para Jesús. Buscarlo donde se deje buscar. O quizás, donde se deje encontrar.